Llegó con alguna expectativa al fútbol colombiano y con un contrato muy jugoso. Ya en el campo de juego desde la manera como portaba el uniforme hasta su desempeño deportivo era extraño. El fichaje no solo terminó en un fracaso, sino con problemas de dinero con un club árabe. La única vez que pudo embocarla dentro del arco fue en una jugada muy curiosa.
Los azules iniciaban el 2014 con el “Proyecto Español”, inexplicablemente desde el final del 2013 le comunicaron a Hernán Torres que no seguiría en el equipo una vez acabara el campeonato. Juan Carlos Ortiz ahora tomaba el mando y contaba con el 25% de las acciones del club entre las suyas propias y la de sus allegados. Ortiz había creado una compañía llamada Valores Incorporados a la que Millonarios le debía plata y todo terminó meses después en un escándalo financiero con el Grupo Interbolsa y el Fondo Premium.
Felipe Gaitán salió de la presidencia y para el 2014 lo reemplazó momentáneamente Juan Carlos Saldarriaga y luego Enrique Camacho. Como Director Deportivo, Juan Carlos Ortiz le apostó a un desconocido José Portolés y de España también llegó Juan Manuel Lillo como técnico. De Lillo se sabía que había dirigido a Pep Guardiola en Dorados de Sinaloa y su historia estaba marcada por algunos descensos en su país. Hubo un fichaje importante como el del experimentado Fabián Vargas, de Corea del Sur arribó Anderson Plata y regresaron de México, Oswaldo Henríquez y Omar Vásquez.
La gran sorpresa fue la contratación de Modeste M’bami, camerunés de 31 años que jugaba en el Al-Ittihad de Arabia Saudita. Pero antes de él se anunció a Wesley Lopes, brasileño que era todo un trotamundos: Fortaleza (Brasil), Peñafiel (Portugal), Alavés (España), Grasshopper (Suiza), Vaslui (Rumania) y Al-Hilal (Arabia Saudita) eran algunos de sus equipos. Sus mejores momentos los vivió en Rumania donde marcó 70 anotaciones con el Vaslui entre 2009 y 2012. Algunos lo catalogaron como el hombre de los 150 goles, aunque en sus registros oficiales no se encontraban más de 130.
“Estoy muy feliz de venir a Millonarios. Es el equipo más grande de Colombia, con la mejor y más grande hinchada. Cuando me dijeron que viniera a Millonarios, no lo pensé dos veces”, dijo el brasileño. El transfer llegó hasta el 21 de febrero y su debut se produjo a los 5 días en El Campín ante el Huila. Lillo puso una nómina mixta, con Wesley como titular, y al término del primer tiempo ya iban perdiendo 0 – 2. En el segundo tiempo los capitalinos empataron cuando Dayro Moreno entró al partido.
Los hinchas pudieron ver al zurdo brasileño, algo displicente y con pinta de basquetbolista. El atacante usaba una pantaloneta ancha y larga y las medias casi como tobilleras. Al siguiente partido entró los últimos segundos, literalmente, en la victoria de Millonarios 2 – 1 ante Santa Fe. Lillo siguió dándole minutos, pero la verdad es que no cuadraba en un equipo que aparte de los mencionados anteriormente contaba con otros jugadores como: Mayer Candelo, Harrison Otálvaro y Jonathan Agudelo. Claramente no era la esperanza de gol.
Por la fecha 14 los ‘embajadores’ visitaron al Medellín y Wesley entró a los 62 minutos cuando iban perdiendo 1 – 0. A los 77, Dayro Moreno metió un centro a media altura, un defensa la rechazó y el balón se fue muy alto con dirección al arco. Mientras la pelota viajaba, Wesley se ubicó en la línea del arco, al tiempo que el arquero y el zaguero se paraban e intentaban llegar al rechazo. Del cielo le llegó el gol a brasileño que con un torpe cabezazo, y hasta rozando el brazo, empató el partido. Los paisas protestaron, pero el árbitro validó el gol. Al final no sirvió de nada porque Medellín ganó 2 – 1. (Ver gol)
Un par de semanas después, Wesley dio una entrevista a ‘El Alargue’ de Caracol Radio. Allí lo aclaró todo: “La gente tiene que saber que yo no soy un delantero, yo siempre he jugado como un media punta, que siempre llega para finalizar, que es muy diferente a un delantero. yo he venido a hacer goles, pero solo he hecho uno. Entonces es normal que la gente no esté contenta”. Lo curioso es que Millonarios lo había presentado como: “Un goleador de raza que le gusta rematar al arco rival en cualquier posición y al mismo tiempo contribuye a generar juego para sus compañeros de ataque”.
Millonarios cumplió una buena campaña y clasificó segundo. En cuartos de final eliminó a La Equidad y en la semifinal cayó con Junior por penales. Wesley tuvo nula participación en esas finales. M’Bami y Wesley se marcharon luego de tener 6 meses de un millonarios contrato. En agosto echaron a Lillo y Portolés y años después al equipo lo multó la DIAN por una inconsistencia en sus pagos. Juan Carlos Ortiz debió entregar sus acciones de Millonarios, estuvo detenido y en 2019 lo condenaron a una pena de 7 años por captación masiva de dinero.
Wesley Lopes no solo disputó apenas 427 minutos y anotó un gol, sino que también dejó líos legales. El Al- Hilal demandó a Millonarios porque según ellos el brasileño aún tenía contrato en Arabia Saudita cuando viajó a Colombiano. La FIFA intervinó y al final Millonarios debió pagar un dinero, todo mal. En 2016 hubo rumores de que Wesley había muerto en un entrenamiento en Brasil y el atacante publicó: “Escuché que alguien me estaba matando, qué chiste… Estoy mejor y más saludable que nunca, ahora estoy con mi esposa y mi niño y nos sentimos bien. Llegó la mala noticia. Creo que alguien quería hacer una broma. ¡Cálmate! Wesley tiene mucho tiempo de vida”.
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