Hablar del Corinthians te lleva a tocar las fibras más profundas del corazón de la ‘torcida del Timão’, “ser corinthiano es ser también un poco más brasileño” dice una de las melodías que el cantautor brasileño Toquinho le dedicó y pasó a ser estandarte para los fanáticos. No en vano le llaman ‘el equipo del pueblo’.
Corinthians hace parte del selecto grupo de los más grandes de Brasil y eso es decir mucho dentro de un campeonato que respira grandeza en todos sus rincones; para referirse a este club hay que hacerlo con mucho respeto, es referirse a un grande del continente americano y, además, un campeón del mundo. Por fortuna, Colombia no escapó de probar las mieles de esa gloria, incluso hubo un nombre que trascendió en lo más profundo de su hinchada y hoy su recuerdo aún se mantiene con vida.
Freddy Rincón es ese protagonista que, a la fecha sigue siendo uno de los extranjeros más exitosos que han pasado por la institución y, por supuesto, el colombiano más destacado. Su paso se dio entre 1997 y 2000, y, durante esa aventura cosechó cuatro títulos: el Brasileirao en 1998 y 1999; el torneo estadual Paulista en 1999, pero sin duda alguna, el que lo catapultó al Olimpo fue el Mundial de Clubes en el año 2000.
Puede leer: Los Colombianos Que Han Jugado En River Plate De Argentina
Y sí, se merece un párrafo aparte porque ‘el coloso de Buenaventura’ se destacó desde su llegada, se hizo dueño y referente del mediocampo, y, se ganó el honor de portar la cinta de capitán, pero el momento en el que quedó inmortalizado en los corazones del equipo paulista fue cuando levantó el trofeo del primer Mundial de Clubes celebrado por la FIFA. Se enfrentó a su exequipo, el Real Madrid, pero le ganó la final, por penales, al Vasco da Gama. En total, jugó 151 partidos y marcó 37 goles, aun así, lo más valioso es su inclusión al salón de la fama del ‘Timão’ en 2011 junto a estrellas brasileñas y mundiales como el gran Ronaldo Nazario.
Más en el presente aparece el nombre de Víctor Cantillo, un volante que llegó con 26 años, procedente del Junior de Barranquilla a formar parte del club en 2020 y que apenas tendría su primera experiencia internacional. Su arribo generó altas expectativas por las recientes presentaciones que había tenido con el cuadro tiburón tanto en la liga colombiana como en la Copa Sudamericana, pero la realidad es que su estadía en Corinthians no ha sido de mucha relevancia y, más bien, podría decirse que bastante irregular, nunca pudo hacerse un lugar fijo en el mediocampo del conjunto paulista. Sin embargo, a la fecha, suma más de un centenar de compromisos disputados.
Los otros dos cafeteros que pasaron por las filas del ‘equipo del pueblo’ son Stiven Mendoza y Yony González. El primero tiene un caso curioso porque llamó la atención del ‘Timão’ estando en la Superliga de India, llegaron a llamarle ‘Makelele’ por su similitud con el exjugador francés y hasta la gran estrella de la selección brasilera, ‘Zico’, elogió al atacante colombiano calificándolo de “rápido y habilidoso”; su fichaje se dio en diciembre de 2014 y en 2015, la ansiada aventura, que terminó más rápido de lo que se esperaba y todos hubieran querido. Aunque conservaron su ficha deportiva por mucho más tiempo, tan solo fueron 16 partidos los que pudo jugar de manera oficial, diez por la liga local y los seis restantes, por Copa Libertadores y, apenas, una anotación.
Puede leer: Colombianos Que Han Jugado En El Real Madrid
Por otro lado, González, llegó en calidad de préstamo desde el Benfica de Portugal, pues necesitaban que tomara rodaje los seis meses restantes para finalizar la temporada europea y, luego, debieron haber ejercido la opción de compra acordada por el 50% de su pase, pero el 2020 sorprendió al mundo entero con la pandemia del Covid-19 y un rumbo drásticamente diferente al que se planeó en un inicio. En su contrato había una cláusula que decía que, si Yony jugaba cinco partidos, Corinthians tendría la obligación de adquirir la mitad de sus derechos deportivos, pero casualidad o no, solo alcanzó a disputar cuatro por lo que fue devuelto al conjunto portugués. Y así fue su corta historia en el cuadro paulista. Sin embargo, fue por causas ajenas a su rendimiento deportivo. El vínculo entre el ‘Timão’ y los jugadores cafeteros es de esos inquebrantables, son de esos lazos difíciles de desatar porque el nudo quedó bien hecho e, inevitablemente, fue gracias a Freddy Rincón. Gracias a ‘el coloso’ que dejó huella y se ganó el cariño de los ‘torcedores’, hoy el futbolista colombiano es bienvenido y lo hacen parte de su familia, más allá de que luego el nivel deportivo dictaminé otra cosa. Es increíble que, en el país de los pentacampeones del mundo, teniendo tantas estrellas y tanto talento en cada rincón, uno de los nuestros haya ondeado la bandera tricolor con tal desparpajo; porque sí, Corinthians de Brasil fue campeón del mundo, pero quien levantó la copa con la cinta de capitán fue nuestro Freddy y será eternamente de Colombia.