Cuando se paró un partido para que Agustín Julio fuera al baño

Cuando se paró un partido para que Agustín Julio fuera al baño

Es una de las curiosas historias que vivió el histórico arquero cartagenero en su larga carrera. Al comienzo hubo preocupación, luego especulaciones y finalmente risas con la explicación dada.

Por la tercera fecha del Finalización 2010, Santa Fe recibía al Cortuluá en el Estadio El Campín que estaba en plena remodelación para el Mundial Sub 20 del 2011. Los capitalinos venían de ganarle al Medellín y al América, mientras que los vallecaucanos habían perdido con Boyacá Chicó y empatado con el Huila.

El primer tiempo finalizó sin goles y a los 51 minutos se abrió la cuenta tras un remate de Mario González que desvió el defensa Gerardo Mesa y la metió en su propia puerta. Los dirigidos por Néstor Otero conseguían el primer el gol en un partido que no era fácil para los albirrojos.

A los 63 minutos el volante Camilo Giraldo se disponía a cobrar un tiro libre a favor del visitante. Inesperadamente Agustín Julio se tiró al piso y comenzó a mostrar signos de dolor en su estomago. Hilario Cuenú, capital del Cortuluá, fue a presionar al árbitro Sebastián Restrepo porque consideraba que Julio hacía tiempo, pues en ningún momento sufrió un golpe o algo parecido.

De manera sorpresiva el arquero se paró y salió corriendo al camerino. Sin guardameta no se puede reanudar el compromiso y por eso el partido estuvo parado durante 5 minutos. Agustín Julio entró como nuevo al campo de juego y agradeciéndole al árbitro.

Santa Fe terminaría marcando otros dos goles gracias a un penal cobrado por Omar Pérez y una anotación del chileno Julio Gutiérrez. Con la victoria el club bogotano sumaba un puntaje perfecto en sus primeras tres presentaciones y al final estuvo muy cerca de ser finalista en ese campeonato.

Después del partido, Agustín Julio explicó que en el intermedio se había tomado un tinto “muy cargado”. Desde los primeros minutos del segundo tiempo empezó a sentir un cólico hasta que finalmente no aguantó para ir al baño. Además, debió tomarse una pastilla para controlar el dolor.