Sus limitaciones en la parte física la compensa con su gran técnica, dominio de balón y pegada. Muy joven fue figura con su equipo para mantener la categoría, pero vivió un duro momento. El victimario pasó a ser víctima cuando hizo una fuerte denuncia pública.
Juan Fernando Quintero hizo las divisiones menores en el Envigado donde llegó a disputar el Pony Fútbol. Creció sin su papá quien desapareció en 1995 luego de presentarse en la Brigada VII para obtener la libreta militar y tener un altercado con el capitán Zapateiro Altamirando. Su baja estatura no impidió que con solo 16 años en 2009 lo puso a debutar Oscar Aristizábal en primera división. Para el 2010 los ‘naranjas’ vivían una situación difícil intentando escapar del descenso.
Pedro Sarmiento asumió las riendas del equipo a mitad de año y en el Finalización el Envigado apenas sumó 9 puntos. El Cortuluá descendió directamente y los antioqueños debieron jugar la promoción contra el Deportivo Pasto que fue subcampeón de la B. La ida se disputó en la capital nariñense, Quintero ingresó a los 67 minutos y marcó el único gol del partido en el último minuto tras una gran jugada individual y rematar de media distancia.
El 15 de diciembre solo se pudo disputar el primer tiempo en el Polideportivo Sur por lluvia. Al otro día se reanudó a las 10:00 am y Weimar Olivares puso la ventaja para los locales a los 55. Los hinchas empezaron a presionar al técnico para meter a Quintero, querían ver espectáculo y le gritaban: “¡Miedoso, miedoso, miedoso!”. A falta de 13 minutos Sarmiento hizo caso y según Carlos ‘Chumi’ Álvarez el defensa Germán Mera aseguró: “Lo voy a tirar al aire”.
El ‘Chumi’ anotó el 2 – 0 y la serie ya estaba liquidada. Sin embargo, a los 84 ‘Juanfer’ hizo una pared con Néider Morantes y Mera cumplió su promesa. Fuerte patada al joven talentoso que salió volando. Llorando y en camilla abandonó el terreno de juego mientras se lamentaba: “Dios mío ¿por qué? ¿por qué?”. Una ambulancia se llevó a Quintero y la victoria y permanencia en la A tuvo un sabor agridulce.
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“Me dio mucha piedra porque la gente piensa que le tengo bronca a Juan Fernando. Empezaron a decir que tenía que meterlo y yo de pendejo lo metí. Lo que hago es cuidarlo. Conozco los momentos y sé medir el termómetro. Soy el culpable que al ‘pelao’ lo tiraran a la jauría. No puedo bailar al son de la tribuna”, dijo Pedro Sarmiento. “Los jugadores de antes eran respetuosos, entraban con todo, pero cuidando los jugadores habilidosos. Me tocó a mí que eran jugadores de mucha experiencia, fuertes, pero sin mala intención. Ahora mirá esta jugada de Juan Fernando, opaca todo”, opinó Néider Morantes.
Por supuesto, Mera se marchó expulsado y ‘Juanfer’ sufrió una fractura de la tibia. El defensa se defendió diciendo: “Yo pedí el teléfono de él para pedirle disculpas y estar pendiente de su operación. También quiero hablar con su madre que estaba molesta conmigo. Pero nunca tuve intención de dañarlo”. La cosa no quedó ahí y en conversación con Red Deportivo de Cali, Mera contó que le advirtieron que el ambiente se “estaba calentando” y que mejor se fuera.
Casi de inmediato Mera recogió sus cosas en el hotel y salió al aeropuerto para viajar a Cali, pues el Deportivo Cali era el dueño de sus derechos deportivos. “Mis compañeros me dijeron que al hotel fueron a buscarme en una camioneta blanca, pero yo ya había viajado”. En el estadio a uno de los jugadores del Pasto lo habían confundido con Mera y le advirtieron que eso no se quedaría así. Afortunadamente la operación salió bien para Quintero y a los 7 meses volvió a jugar, mientras que a Germán Mera le dieron 7 fechas de sanción.