Córdoba, ‘Chonto’, ‘Coroncoro’, Mendoza, Pérez, Leonel, ‘Barrabás’, Freddy, ‘El Pibe’, ‘El Tren’ y ‘El Tino’; esta alineación es historia patria: el once del día del cinco a cero. Ese partido definía quién iba a repechaje, fue por las Eliminatorias al Mundial Estados Unidos 1994, se enfrentaban el primero y segundo del grupo, donde la tricolor lideraba.
El rival a vencer fue Argentina, que jugó dos finales consecutivas de la Copa del Mundo, ganó una edición y era bicampeona de América. Además, llevaba más de 30 partidos sin perder. En el Estadio Monumental de Buenos Aires, la albiceleste salió con Goycochea, Saldaña, Borelli, Ruggeri, Altamirano, Zapata, Redondo, Simeone, Rodríguez, Medina y Batistuta. Uno de los condimentos especiales ese día fue la ausencia de Diego Armando Maradona en el campo y, a cambio, su presencia en la tribuna por una polémica decisión de Alfio Basile. Previo al partido, el ‘pelusa’ dijo: “Nosotros no debemos romper la historia, ellos no deben romper la historia. Argentina arriba, Colombia abajo”.
Colombia fue superior desde el comienzo, con una defensa sólida y un gran manejo del mediocampo con Valderrama, que ese año fue galardonado como Rey de América. Sin embargo, hasta el 42′ llegó el primero: El Pibe anestesió la bola, condujo, enganchó entre cuatro argentinos y de zurda la puso para Freddy, que recibió abierto, ganó en velocidad y amagó con tirar; “Goyco” se extendió en el suelo ante el engaño, al igual que Altamirano, que no pudo sacarla de barrida y la pelota cruzó la línea.
El “Coloso de Buenaventura” celebró señalando el cielo, después tirando un puño al aire y de caballito con el Tino. Primera alegría de la noche, en medio de los chiflidos de la hinchada local.
Ya en el complemento todo fue carnaval, aunque Ruggeri raspó a Valderrama cada vez que pudo. Al 49′ llegó el segundo gol, ese que encaminó la goleada e hizo que no se tildara de suerte la sinergia colombiana que destiló mariposas amarillas en Buenos Aires. Freddy trazó un pase largo que durmió “Fausto” con la derecha y encaró enseguida a Borelli que, atónito, se comió las fintas de Asprilla, quien cayendo definió ante la salida a destiempo del portero para la segunda sonrisa de la noche.
Celebración en el córner mientras Saldaña ganaba el regaño del capitán argentino. El Tino hizo una voltereta, se abrazó con Leonel y, mientras El Monumental chiflaba cada vez menos, se unieron Rincón y Valderrama.
Al 70, Asprilla hizo alarde de su velocidad desbordando sesenta metros perseguido de cuatro argentinos que no lo pudieron derribar, puso un pase que desvió Goycochea y el rebote terminó en Leonel Álvarez, quien con confianza intentó la individual y le ganó el duelo a Saldaña, centrando de zurda y Freddy, con una violenta volea, puso lo que en Argentina ya gastaba la tinta de las imprentas titulando el partido como vergüenza. Alfio Basile se agitó, pues por diferencia de gol podían quedar fuera de Estados Unidos 1994 y firmar un papelón aún más grande.
Seis minutos después, el 11 colombiano siguió con hambre de gloria, presionó y ganó un balón que la albiceleste ya jugaba con displicencia, llegó al área y pintó un globito al ángulo con el que “Goyco” solo pudo girar la cabeza. Faustino celebró, de nuevo, con una acrobacia, esta vez cayendo de rodillas y con una bendición que acompañaron Freddy, el Pibe, Leonel. Barrabás y Coroncoro en un abrazo para la eternidad.
Las cámaras enfocaban al ausente Diego Armando en la grada y a Diego Pablo Simeone en la cancha, que tuvo la mítica dorsal 10 en un juego para el olvido, tanto así que en el cierre del partido le dio un codazo en la cara a Adolfo Valencia que significaba la expulsión del argentino. Cuentan que Gabriel Jaime Gómez le dijo al juez central que no lo echara, pues así no tendrían excusa alguna para lo que era la goleada de Colombia. El partido siguió con veintidós jugadores en cancha.
En el 85, Valderrama puso un pase magistral de tres dedos para el Tino, que incansable, desbordó una vez más y asistió al Tren Valencia sobre el punto penal, con un amague arrodilló al arquero en el césped y firmó el cinco a cero de Colombia. El estadio interrumpió un largo silencio con aplausos de los que Maradona fue cómplice desde la tribuna.
Ver los goles: Argentina 0-5 Colombia, 5 de septiembre de 1993
Todo fue furor y alegría con el resultado final, aunque sea para la mayoría. ‘Bolillo’ Gómez se tomaba la cabeza preocupado diciéndole a Maturana: “Pacho, nos jodimos… Ahora nos van a exigir el título en el Mundial y nosotros todavía no tenemos esa historia“.
Sin embargo, fue tal vez la noche en que más sonrisas hubo desde el Caribe al Amazonas, en medio de tanto lío, de tanta realidad, de las noticias que nos inundaban día a día; esa noche del 5 de septiembre de 1993 los colombianos sonrieron, al menos, cinco veces en 90 minutos.