Sin saber todavía quién será el flamante campeón del primer semestre del 2024, esta edición de la liga colombiana se verá marcada por otras tantas situaciones que involucraron a más de un protagonista.
Varias notas positivas para resaltar en esta primera mitad, otras tantas que generaron polémica y unas que, definitivamente, no deberían volver a pasar y que sirven para replantearnos el aporte que le hacemos a la sociedad en la que vivimos.
Las Notas positivas
Sería una falta de respeto de mi parte no iniciar con el récord de Dayro Mauricio Moreno Galindo. No es un hecho aislado ni un dato cualquiera que se actualice año tras año.
Por muchos años Sergio Galván Rey fue el goleador absoluto del fútbol colombiano y Dayro, se puso entre ceja y ceja superarlo y lo consiguió con todos los honores. Sobrepasó los 224 goles del argentino y, al término del semestre, su cuenta llegó a 228. Así que Once Caldas puede jactarse de tener en su historial a los dos máximos anotadores del balompié nacional. También es para resaltar su presencia en los cuadrangulares luego de seis años.
Otra de las notas positivas es la campaña del Atlético Bucaramanga, el equipo leopardo terminó líder del todos contra todos por primera vez en su historia y logró un merecido cupo a la gran final.
Con 75 años recién cumplidos, sueñan con bordar la primera estrella a su escudo y superar el subcampeonato obtenido en 1997 cuando América de Cali les arrebató el título.
A veces, la edad solo es un número y eso lo han demostrado Hugo Rodallega, Carlos Bacca y el mismo Dayro, los goleadores con experiencia.
De momento, el delantero de Junior se estaría quedando con el botín de oro por sus 12 anotaciones; el de Once Caldas cerró en 11 y solo ‘Hugol’ tiene la posibilidad de seguir sumando este semestre en los dos partidos de la final, la fase de cuadrangulares la cerró con 11.
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También hubo varios arqueros destacados que fueron una prenda de seguridad para su equipo y demostraron el gran nivel futbolístico que atraviesan.
Santiago Mele, el uruguayo que custodia el arco de Junior hace menos de un año y salió campeón, tiene una de las notas más altas; sin sus atajadas, el cuadro barranquillero no habría llegado hasta la última fecha de cuadrangulares con posibilidad de jugar la final.
Andrés Mosquera Marmolejo, nuevamente, tiene la oportunidad de estar en la final de la liga colombiana. En 2023-II, fue subcampeón con el DIM y, seguramente, con Santa Fe tratará de evitar los penales.
Aldair Quintana querrá quedar en la historia del conjunto leopardo y evitar la caída de su arco en la final, mostró un gran rendimiento durante el semestre. Aquella atajada al minuto 80 ante el Deportivo Pereira fue clave para llegar a la gran fiesta.
Salvador Ichazo es el otro portero uruguayo que pasó el semestre con una calificación más que sobresaliente, el guardameta de Deportivo Pereira sorprendió gratamente con su rendimiento y sus múltiples atajadas.
Ahora sí, empezamos con los bochornos, y es una lástima que pasemos de protagonistas a antagonistas. A lo largo de la fase regular también se vieron polémicas fecha tras fecha; ya fuera porque los árbitros y el VAR dejaron de pitar o pitaron de más.
Las notas negativas
Atlético Nacional y América de Cali, dos de los grandes quedaron eliminados de los ocho. Además, el declive de Millonarios durante el semestre y la floja presentación de La Equidad en los cuadrangulares perdiendo todos los partidos.
Para los equipos grandes e históricos, siempre será una obligación estar entre los mejores; verdolagas y escarlatas fracasaron rotundamente al quedarse fuera del grupo de clasificados. Tuvieron más puntos bajos que altos en el transcurrir del primer semestre, tanto deportiva como institucionalmente.
En el caso de los embajadores, una epidemia de lesiones y no adecuar su nómina correctamente, conllevó a la eliminación temprana en los cuadrangulares y pasar vergüenza en el torneo internacional.
La navaja que le cayó a Pablo Ceppelini y todo siguió cómo si nada. Ese episodio es uno de los más inauditos que ha pasado en el último tiempo en el fútbol colombiano.
En el marco del clásico paisa y con arbitraje de Wilmar Roldán (sí el mejor que tenemos en el país), la orden después del golpe en la cabeza del uruguayo fue: “juegue, juegue”. Por suerte, el artefacto le impactó cerrado y no causó ningún daño de gravedad. ¿Qué tipo de gente ingresa a nuestros estadios?
No contentos con eso, también una jueza fue agredida. Una moneda lanzada desde la tribuna, la impactó en el rostro y tuvo que ser atendida. Para fortuna de nuestro fútbol y de ella, por supuesto, Jenny Torres pudo continuar y evitamos la vergüenza de recorrer las portadas de noticias internacionales con un peor desenlace.
Las múltiples invasiones al campo y peleas en las tribunas en los estadios, parece que es un tema de nunca acabar. Una vez más, no son hinchas sino delincuentes disfrazados. Soñamos con el día que le impidan la entrada a todos los problemáticos.
Por último, pero no menos importante, la insólita mano de James Aguirre fuera del área y nadie se dio cuenta.
Mucho más no hay que decir, todos los que vimos el partido quedamos sin entender porqué el arquero levantó la pelota estando fuera de su área y no llamó la atención del cuerpo arbitral ni del VAR. un despropósito absoluto.
Ver video: Arquero de Once Caldas comete error fuera del área
