Un argentino anotó un importante gol en las estadísticas del club embajador. Se decía que el premio iba a ser un carro pero todo terminó en algo mucho menor.
Néstor Villarreal llegó al América de Cali en 1992 procedente de Independiente de Avellaneda. Al volante lo ficharon porque Leonel Álvarez se había lesionado y estuvo hasta 1995 con un buen rendimiento en algunos momentos. Más adelante pasó por el Barcelona de Ecuador, a comienzo de 1997 lo fichó el Junior y en septiembre del mismo año se vistió de azul. Se dice que al gaucho le pusieron el apodo de ‘Pitaya’ porque una vez comió esta fruta y le sentó muy mal.
Millonarios recibió al Once Caldas el 10 de diciembre de 1997. Poco antes del partido a Villarreal le informaron que no continuaría en el club el siguiente año. Los embajadores tenían anotados por Liga de Colombia 3.999 goles y se esperaba que contra el ‘blanco-blanco’ se marcara el 4.000. Todos creían que el ‘Gato’ Pérez sería el elegido aunque también estaban Marcio Cruz, Alex Daza y el ‘Flaco’ Rivera.
Sin embargo, el gol 1.000, 2.000 y 3.000 de la historia albiazul lo anotaron extranjeros: Carlos Bolla (Argentino), Apolinar Paniagua (Paraguayo) y Juan Gilberto Funes. Según recuerdan algunos jugadores un directivo llamó a la concentración y dijo que el premio por marcar el gol 4.000 sería un automóvil.
Once Caldas empezó ganando con gol de Sergio Galván Rey. Más adelante Flaminio Rivas desbordó por sector derecho, centró y Villarreal le ganó el cabezazo a Francisco Foronda. No contento con esto el argentino hizo el segundo después de cobrar un tiro libre. Millonarios ganó pero a ‘Pitaya’ no le dieron un carro sino que recibió un celular como “premio”.
En 2015 la historia se volvió a repetir y el argentino Federico Insúa hizo el gol 5.000 de Millonarios. Néstor Villarreal solo jugó 12 partidos con los embajadores y esto le alcanzó para quedar en el recuerdo. Volvió al América de Cali en 1998 pero no tuvo un buen paso como había sido su primera etapa.