Es una de las historias más insólitas y curiosas en el fútbol argentino. La protagonizaron uno de los mejores técnicos en la historia de Argentina, uno de los mejores delanteros de la historia y un futbolista colombiano que vivió buenos momentos a finales de los 80 y comienzo de los 90.
Todo comenzó en enero de 1993 cuando en el Eje Cafetero se realizó el Sudamericano Sub 17. Con la Selección de Brasil llegó un tal Ronaldo Luís Nazário de Lima del Sao Cristovao de Futebol e Regatas, modesto club de Río de Janeiro que disputaba el Campeonato Carioca. El joven anotó 8 goles en el campeonato, aunque Brasil no clasificó al Mundial. Por su calidad, el Cruzeiro lo fichó a las pocas semanas y empezó su carrera profesional con solo 16 años.
En octubre de 1993, Atlético Nacional enfrentó a Estudiantes de La Plata por los cuartos de final de la Supercopa Sudamericana. A César Luis Menotti las directivas del club verdolaga lo invitaron a ver el partido, los colombianos ganaron 1 – 0 tanto en Medellín como en Argentina. El técnico, que fue campeón del mundo con argentina en 1978, quedó deslumbrado con Andrés Escobar y Jhon Jairo Tréllez.
El atacante nacido en Turbo había sido parte de Selecciones Colombia Juveniles, campeón de la Copa Libertadores con Nacional en 1989 y jugó en el Zúrich de Suiza por dos temporadas. También ganó la Liga Colombiana en 1991 y en 1992 fue el goleador del año con 25 anotaciones. De Tréllez no solo llamaba a atención su zurda, sino su look con rastas.
Apenas un mes después de ese partido Estudiantes vs Atlético Nacional, el ‘Flaco’ Menotti fue nombrado técnico de Boca Juniors. Ya era casi al final del año y empezaba a preparar la temporada 1994. Cuenta la historia que al entrenador le ofrecieron a ese joven Ronaldo de 17 años que ya llevaba 20 goles anotados con Cruzeiro en apenas 21 partidos- Sin embargo, Menotti ya le había puesto el ojo a Tréllez para reforzar el ataque Xeneize.
Lo curioso es que Cruzeiro quedó en el mismo grupo de Boca Juniors para la Copa Libertadores de 1994 y un gol de Ronaldo en el último partido eliminó a los argentinos. Solo 6 días después de ese juego, el 13 de abril de 1994, llegó Jhon Jairo Tréllez a Buenos Aires para vestirse de ‘bostero’. La empresa Torneos y Competencias compró al colombiano por 2 millones de dólares y se lo cedió a Boca.
Cuando Ciciliano estuvo por encima de Ronaldo en un Sudamericano Sub 17
Menotti puso a Tréllez de volante y le dio la ‘10’, mucha responsabilidad. Más cuando el segundo partido fue ante River Plate en La Bombonera. Al antioqueño lo sacaron a los 64 minutos, los hinchas no le perdonaron su frialdad y ese día Boca perdió después de 8 años en su estadio con el clásico rival. Tréllez tenía dos objetivos para ir a Boca Juniors. Ganarse un puesto para el Mundial de USA, luego de haber quedado fuera en 1990, e ir al Real Madrid.
“Yo había hablado con Jorge Valdano (ex entrenador del Madrid) que iba a estar 6 meses en el equipo argentino y luego me iba al Real Madrid. Boca era un trampolín para pegar el salto a la Casa Blanca”, dijo Tréllez en una entrevista a Infobae. El jugador se quedó sin Mundial y con los Xeneizes en 20 partidos marcó 2 goles. “El hecho de tener esa camiseta ‘10’, de ser negro y de ser colombiano, generó molestia entre algunos jugadores”, explicó el futbolista en ‘La Chiva’.
De Buenos Aires a Tréllez le quedaron sus visitas al bar Maluco Beleza, que le recomendó un juvenil Román Riquelme, donde ponían reggae y se interesó por grupos como Los Cafres y Los Pericos. El colombiano siempre aceptó que no rindió como esperaba en Boca Juniors. Eso sí, le quedó el recuerdo de cuando marcó un gol y los hinchas empezaron a cantarle en La Bombonera: “colombiano, colombiano, rasta-gol”.
La historia cuenta que Ronaldo fue campeón del mundo en 1994, aunque no jugó ni un solo minuto, y de ahí se marchó al PSV Eindhoven donde inició su exitosa carrera en Europa. Tréllez jugó un tiempo en Juventude de Brasil y regresó a Atlético Nacional. En 2003, Menotti dio una curiosa declaración sobre Ronaldo: “El 98% de los futbolistas no sabe jugar al fútbol. Eso no quiere decir que no puedan hacerlo, saber jugar al fútbol no es lo que hace Figo, que sea eficaz es otra cosa. Ronaldo no sabe jugar al fútbol, Makelele juega mejor que él”.
Colombianos que aparecieron en los álbumes y no fueron al Mundial