Son muy pocos los jugadores que le han dicho no al conjunto “merengue” y entre ellos se encuentra un colombiano. Es el club en el que muchos sueñan estar, el más ganador de Champions League, más mediático y también en el que muchos han fracasado.
Con solo 21 años el defensa colombiano llegó a San Lorenzo de Almagro en 1998. Rionegro, Atlético Nacional y la Selección Colombia Sub 20 era donde se había dado a conocer. El empresario Gustavo Mascardi iba a Medellín por Mauricio “Chicho” Serna y Juan Pablo Ángel, pero también se llevó al jugador de 1.73 metros. Precisamente por su baja estatura el “Coco” Basile lo puso de lateral tanto por derecha y por izquierda hasta que en 1999, Oscar Ruggeri le dio la confianza como central.
Córdoba se afianzó como uno de los mejores defensores de la Liga Argentina y además en la Copa América de 1999 tuvo un buen desempeño. En octubre de ese año llegó el interés del Inter de Milán que tenía varios sudamericanos en su plantilla: Martín Rivas, Javier Zanetti, Álvaro Recoba, Ronaldo e Iván Zamorano. Para Iván Ramiro era todo un sueño, en su juventud seguía a Faustino Asprilla en el Parma y la Liga Italiana era su favorita.
Sin embargo, Ruggeri habría recomendado al colombiano al Real Madrid, el argentino jugó allí en 1989 – 1990 y dijo uno de los grandes elogios para Córdoba: “Es el defensa más rápido del mundo”. Recientemente los “meregues” le habían pagado 5.5 millones de dólares al Once Caldas por Edwin Congo. Los españoles ya tenían varios defensas centrales: Manolo Sanchís, Fernando Hierro, Iván Campo, Aitor Karanka, Iván Helguera y Júlio César.
Fernando Miele, presidente de San Lorenzo, un día le trajo una noticia al paisa: Real Madrid ofreció 3 millones de dólares más. Además, Ruggeri ya le había advertido que los españoles probablemente irían por él. “A mí me da mucha lástima que usted pierda platica, pero yo ya estoy decidido, voy al Inter”, le respondió al presidente. Era el sueño de Iván Ramiro Córdoba y ni el Real Madrid lo haría cambiar de parecer.
A final de 1999 viajó a Italia y se convirtió en el colombiano más caro de la historia. Inter de Milán debió desembolsar 17 millones de dólares por el antioqueño. Unos años después lo quiso Florentino Pérez de nuevo para el Real Madrid, pero Córdoba rechazó el acercamiento porque había renovado recientemente con el Inter. Iván Ramiro jamás dejó Italia y se vistió de ‘nerazzurri’ el resto de su carrera hasta que se retiró en 2012.