La Copa Libertadores Femenina es uno de los torneos más importantes del fútbol femenino en Sudamérica. Desde su creación en 2009, este certamen ha crecido en popularidad, atrayendo a los mejores equipos de cada país del sur del continente y sirviendo como una plataforma clave para la visibilización y el desarrollo del fútbol femenino. A medida que los equipos se preparan para luchar por el título, la competencia promete mostrar el mejor nivel de juego, con jugadoras que no solo buscan la gloria continental, sino también afianzar el lugar del fútbol jugado por mujeres en el panorama deportivo global.
La participación de los equipos colombianos en la Copa Libertadores Femenina ha sido clave para impulsar el desarrollo del fútbol femenino en el país. A través de su presencia constante en el torneo, los clubes cafeteros han demostrado su nivel competitivo, lo que contribuye a consolidar su posición en el balompié sudamericano. Su participación no solo representa una oportunidad para mostrar el talento nacional, sino que también genera un impacto positivo en la promoción del deporte femenino en Colombia, inspirando a nuevas generaciones y fomentando un mayor apoyo al fútbol femenino a nivel local e internacional.
Formas Íntimas, el pionero
Fue el primer equipo colombiano en participar en este certamen, una organización que se ha consolidado como pionera del fútbol femenino profesional en Colombia, transformando la vida de mujeres y niñas a través del deporte y la educación durante más de 20 años. A lo largo de su trayectoria, ha demostrado que es posible ser mujer y futbolista, promoviendo el desarrollo tanto personal como profesional de sus participantes. Además, ha sido una cantera fundamental para la Selección Colombia y para equipos profesionales, tanto a nivel nacional como internacional.
Entre ellos, se destaca el Atlético Nacional Femenino, que ha contado con jugadoras formadas en sus filas, reafirmando su impacto en el fútbol femenino colombiano y su capacidad para nutrir el talento deportivo. Formas Íntimas participó desde la primera edición, en 2009, hasta la séptima, disputada en 2015. Entre sus participaciones destacan las de 2009 y 2014, cuando llegaron a las semifinales, y la de 2013, en la que disputaron la final, aunque no lograron alzar el trofeo en aquella ocasión.
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La Evolución
En 2016, un nuevo equipo colombiano hizo parte del certamen continental, el Club Deportivo Generaciones Palmiranas, un equipo de fútbol femenino y masculino que representa al municipio de Palmira, Valle del Cauca. El club vallecaucano fue eliminado en la fase de grupos, finalizando así su corta historia en la Copa Libertadores Femenina.
En la edición de 2017, fue la primera vez que uno de los equipos tradicionales del país participó en este torneo. Independiente Santa Fe clasificó por primera vez al certamen continental, pero no logró avanzar de la fase de grupos. A pesar de esto, fue una primera toma de contacto importante para uno de los equipos que, posteriormente, se convertiría en uno de los mejores del fútbol femenino en el país.
La Gloria
Atlético Huila hizo historia en 2018 al convertirse en el primer equipo colombiano en ganar la Copa Libertadores Femenina, venciendo en la tanda de penales a Santos. Su victoria no solo fue un hito para el club, sino también un logro trascendental para el fútbol femenino en Colombia, al demostrar que los equipos del país podían competir y triunfar al más alto nivel en el continente. El equipo mostró un gran espíritu competitivo y talento en cada partido, dejando una huella imborrable en la historia del torneo.
Este triunfo marcó un antes y un después para el fútbol femenino colombiano, consolidando el crecimiento del deporte en la región.
En la siguiente edición, fueron dos los equipos colombianos participantes. Esto se debió a que Atlético Huila aseguró su cupo al ser campeón de la edición anterior, y se sumó otro grande del país, América de Cali, que selló su primera participación en el certamen con un destacado tercer lugar. Por otro lado, el cuadro opita no logró repetir la hazaña del año anterior, ya que fue eliminado en cuartos de final del torneo.
En 2020, aumentó la diversidad de equipos colombianos en la Copa Libertadores Femenina. Ese año, el turno de debutar en el certamen continental fue para el Deportivo Independiente Medellín, pero esta participación duraría poco, ya que el poderoso de la montaña no logró avanzar de la fase de grupos y quedó eliminado al inicio del campeonato.
En la edición de 2021 de la Copa Libertadores Femenina, Deportivo Cali e Independiente Santa Fe representaron a Colombia con destacadas actuaciones. Santa Fe, con un sólido equipo y gran experiencia, logró llegar hasta la final, donde cayó ante Corinthians, mostrando su capacidad para competir al más alto nivel continental y consiguiendo un subcampeonato.
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Por su parte, Deportivo Cali, en su debut en el torneo, demostró un fútbol dinámico y competitivo, llegando hasta los cuartos de final y consolidándose como uno de los equipos fuertes del país. La participación de ambos clubes en esta edición reafirmó el crecimiento del fútbol femenino colombiano y su capacidad para brillar en competencias internacionales.
La edición de 2022 tuvo una particularidad, ya que dos equipos de la misma ciudad, clásicos rivales, participaron en la misma edición de la copa: América y Deportivo Cali. En esta ocasión, ambos clubes hicieron un buen papel en el certamen, llegando hasta las semifinales, pero ninguno logró avanzar a la final, lo que los llevó a enfrentarse en el partido por el tercer puesto, donde América salió victorioso y se quedó con el tercer lugar.
Anfitriones Continentales
La edición de 2023 fue especial para Colombia, ya que fue sede de la Copa Libertadores Femenina, un acontecimiento de gran relevancia para el desarrollo del fútbol femenino en el país y en la región. Albergar un torneo de esta magnitud no sólo permitió visibilizar el talento local ante un público más amplio, sino que también reforzó el compromiso del país con la promoción y el crecimiento del fútbol jugado por mujeres.
Además, ser sede brindó una oportunidad única para que jugadoras y equipos locales se enfrentaran a la élite del continente en su propio territorio, generando un impacto positivo en la infraestructura deportiva y en la afición.
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La participación de tres equipos colombianos, Independiente Santa Fe, América de Cali y Atlético Nacional, fue significativa. Aunque el conjunto cardenal no logró avanzar de la fase de grupos, América sí lo hizo, pero cayó en la siguiente ronda. Atlético Nacional fue el equipo que llegó más lejos en esta edición, consiguiendo el tercer puesto del certamen.
La edición del 2024 será en Paraguay y, por supuesto, Colombia tendrá representación. El campeón de la Liga Femenina, Deportivo Cali, y el subcampeón Independiente Santa Fe, estarán en los Grupos D y C, respectivamente. La azucareras compartirán con Alianza Lima, Santiago Morning y Guaraní; mientras que las leonas estarán con Peñarol, Dragonas IDV y Ferroviária.
