La Liga Femenina 2024 nos dejó varias cosas tanto en los cuadrangulares semifinales, como en la fase todas contra todas y, en este artículo especial para El Cinco a Cero, dejo mi visión de los equipos que participaron en la octava edición del campeonato.
Santa Fe, un caballo pura sangre de carrera
Las cardenales empezaron con varias dudas, rozando los últimos puestos y hasta antes de la mitad del torneo, estaban fuera de los ocho, pero en la otra mitad las leonas se realzaron, entraron al selecto grupo, tuvieron un buen cuadrangular y clasificaron de manera anticipada a la quinta final en su historia. Además, asegurando su cupo a Copa Libertadores, en Uruguay.
Deportivo Cali, a la final con angustia
Las azucareras también iniciaron con dudas el torneo por lesiones y porque varias de las jugadoras estaban con las Selecciones Colombia Femeninas mayores y juveniles (con decir que solo tuvieron dos o tres jugadoras de campo en la banca y las otras fueron dos arqueras), pero se sobrepusieron a esto y clasificaron tempranamente. En cuadrangulares, hasta la fecha cuatro, no veía claro el panorama, pero ganaron el clásico vallecaucano en casa y también le ganaron a Llaneros en la calurosa Yopal. Además de la ayuda de los goles a favor y de la victoria de Millonarios en Palmira, clasificaron a la final y tienen la ilusión de su segunda estrella. Asimismo, vuelven a la Copa Libertadores Femenina.
Millonarios, inversión para otra decepción
Las embajadoras se reforzaron con dos jugadoras que armaron polémica, todo porque eran de Santa Fe: Liana Salazar y Daniela Garavito, sumado a la incorporación de la entrenadora colombiana Angie Vega que venía del Deportes Antofagasta de Chile. Solo hasta la tercera fecha, Millonarios estuvo fuera de los ocho, pero desde la cuatro se sostuvieron en los ocho y así fueron hasta el final. En los cuadrangulares, les ganó la diferencia de gol y a mi manera de ver, el gol recibido ante Llaneros en el Olaya, pareciera que le hizo falta para clasificar porque, en Palmira, hicieron su trabajo ante América y Deportivo Cali con su victoria ante Llaneros, ganó por diferencia de goles.
América, fracaso rotundo
Las escarlatas cabalgaron en todo momento en la cabeza del campeonato mano a mano con Atlético Nacional, incluyendo un marcador por W.O. al ganarle a Llaneros en Cali (1-0 en cancha y 3-0 en el escritorio). Eran las favoritas, pero decayeron en las dos últimas fechas de los cuadrangulares, perdieron con Deportivo Cali en la penúltima y en la última ante Millonarios; necesitando solamente de un empate y un resultado negativo de las azucareras. La que se llevó las críticas, sobre todo en redes sociales, fue la joven golera Natalia Giraldo, más que todo por su nivel que pareciera haber bajado en demasía desde la Copa Oro con la Selección Colombia y por uno de los goles de Millonarios que eliminó al conjunto rojo caleño de la final.
Atlético Nacional, subió como palma y bajó como coco
Las verdolagas se reforzaron con Yoreli Rincón (que ya había jugado Copa Libertadores con las verdes). Desde el inicio del torneo, rivalizó con América en los puestos altos de la reclasificación y clasificaron a los cuadrangulares como líderes e invictas. En los cuadrangulares, pareciera que se confiaron y no pudieron ganar sus primeros cuatro juegos y solo alzaron para el cierre ya estando eliminadas. Otro punto a favor es que Marcela Restrepo, jugadora verdolaga, se puede alzar con el Botín de Oro a la goleadora del torneo, salvo que Karla Dayana Torres, de Santa Fe, se destape en la final y haga más de tres goles en la serie.
Alianza y Llaneros, las sorpresas
Alianza FC (antiguo Alianza Petrolera) que no jugó en Valledupar, hizo convenio con Yumbo FC (que antiguamente hizo vínculo con Cortuluá hasta el año anterior) y Llaneros FC que siguió con su proceso, a pesar de no hacer buenos cuadrangulares, fueron las gratas sorpresas del campeonato. Las vallecaucanas que, a pesar de hacer un campeonato de altibajos, sacaron la mayoría de sus ahorros de los partidos en casa (solamente perdieron tres) y eso las clasificó a unos cuadrangulares donde solo ganaron dos encuentros, empataron uno y perdieron tres. De otro lado, Llaneros, también tuvo un campeonato irregular, pero sus ahorros en casa hicieron que clasificara a los cuadrangulares semifinales, que fueron para el olvido, solo ganaron un partido y perdieron cinco.
DIM, pasaron raspando y primeras eliminadas de cuadrangulares
Con angustia y sin jugar la última fecha que la vio en casa esperando un resultado negativo o de diferencia de menos goles de La Equidad sobre Junior, DIM clasificó gracias a la diferencia de gol que tuvo en el torneo, pero la campaña de las poderosas fue un desastre en los cuadrangulares terminando últimas del grupo A, más allá de tener a la segunda goleadora del campeonato, Estefanía González.
Deportivo Pereira y Junior, ni la sombra de años anteriores
Las matecañas que fueron protagonistas el año anterior donde llegaron a semifinales, sufrieron varias bajas importantes, entre ellas la ida de Ana María Guzmán al Bayern Múnich, la de Ana Milé González a Millonarios, la de Vanessa Castillo al América y la de Gréicy Landázury que regresó al DIM, pero se sintió mucho más la ida del entrenador Carlos Ariel Osorio. El cambio se sintió, fueron otras jugadoras, otro cuerpo técnico y el equipo terminó antepenúltimo del torneo con apenas nueve puntos. Otro equipo protagonista en torneos anteriores fue Junior, inició 2024 con el argentino Eduardo Collado, que no pudo dirigir ni un partido y, en dichos cotejos estuvo un entrenador encargado en las tres primeras jornadas; en la fecha cuatro llegó Yinaris García como emergencia de un barco que finalmente se hundió y que no tuvo ni una victoria en el campeonato, terminando en el sótano de la tabla con dos puntos, fruto de dos empates.
La Equidad, le faltaron cinco centavitos para el peso
Las aseguradoras nunca estuvieron en los ocho, pero tenían su esperanza en la última fecha. Finalmente, los errores ante Junior en la última jornada le costaron la clasificación, porque hicieron su tarea, cuatro goles, pero recibieron tres por errores defensivos y eso les costó el no entrar en los ocho mejores del torneo.
Los otros equipos
Internacional FC: El otrora Cortuluá quedó eliminado, no solo por diferencia de goles, sino por ceder 11 puntos de las jornadas 9 a la 12, resucitaron con tres triunfos consecutivos en las tres últimas fechas, pero les falló la diferencia de gol.
Deportivo Pasto: Tuvo un gran inicio con liderato incluido, pero estuvo seis fechas sin ganar y eso apabulló sus ilusiones en las últimas fechas de poder avanzar a los ocho.
Cúcuta Deportivo: Su vuelta a la Liga Femenina (no participaba desde 2019) comenzó con dudas, luego con esperanza de tres victorias consecutivas, pero desde la jornada seis del torneo hasta la última, completaron nueve fechas sin ganar.
Real Santander: Las albicelestes tuvieron un gran comienzo con victoria sobre Junior, como visitante en el Metropolitano, pero desde la fecha 2 a la 15, no pudieron ganar en 13 partidos y terminaron penúltimas.
El arbitraje, nivel regular
Si el arbitraje en la Liga masculina no tiene un buen nivel, el femenino resalta por ello y sin ayuda de la tecnología. Nivel regular de las colegiadas en el torneo, por lo que la afición pide a gritos a una dirigencia (ojalá algún día sea seria) que se meta la mano al dril e instaure el VAR en todos los partidos del campeonato y no solo en la final.
Así pues, comparto desde mi visión lo que sucedió en la Liga Femenina 2024 desde la primera jornada hasta la última de los cuadrangulares. Agradezco a Daniela Mejía por la invitación a escribir esta nota de opinión sobre la octava versión del campeonato femenino de fútbol profesional.
Periodista y estadígrafo de la página Fémina Football (www.feminafootball.com)